sanando mis alas
...sólo quiero volver a volar... Cuenta la leyenda Nahuatl que si quieres que un deseo se haga realidad, debes contárselo a papalotl (mariposa) y ella se lo transmitirá a Xochiquetzal, diosa de la alegría y las flores. Si pides tu deseo y liberas a la mariposa, éste llegará al más grande de los cielos y se cumplirá.
miércoles, julio 17, 2013
jueves, octubre 20, 2011
viernes, julio 08, 2011
en donde estés...
Quiero probar mis alas, llegar muy alto, volar contigo,
sentir de frente el viento y llenar la ausencia que hoy me abraza,
que hoy me aparta, que da frio...
Reflejarme en un mirar profundo, gritar a 4 vientos lo que siento,
escribir tu nombre para siempre (que no se borre), tomar tu mano,
mirar arriba, volar sin miedo...
sentir de frente el viento y llenar la ausencia que hoy me abraza,
que hoy me aparta, que da frio...
Reflejarme en un mirar profundo, gritar a 4 vientos lo que siento,
escribir tu nombre para siempre (que no se borre), tomar tu mano,
mirar arriba, volar sin miedo...
miércoles, junio 29, 2011
sábado, septiembre 11, 2010
Espero curarme de ti...
Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.
Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»... Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).
Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.
Jaime Sabines
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.
Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama. (Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»... Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).
Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.
Jaime Sabines
lunes, noviembre 09, 2009
Sin nada que decir...
jueves, agosto 13, 2009
La hoja seca

Me dejé llevar..., así, como arrastrada por el viento, como la hoja seca; esa que se abandona, que no opone resistencia...
Y volé tan alto y me sentí tan libre que hoy, al caer, no hay en mi corazón nada distinto al amor; dolió la caida, no podría negarlo pero...
Gracias por haberme llevado a tocar el cielo...
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